Cada uno diferente y sin embargo mala gente. Se vuelve
inapropiado beber aquí a tu lado esperando que me oigas respirar. No suena
exagerado decir que en el pasado te habría robado una canción. Sigo siendo un
perro atado a tu mano dirigido por tu manipulación. Tú cierras la puerta y yo
abro el congelador. Siempre contrapuestos buscando besos cuando el otro solo
pide diversión. Y sabes que lo entiendo, pero no te entiendo a ti. Que lo único
que tengo es un poco de aire fresco pero lejos de tu dirección. Sigo deteniendo
coches que no saben donde ir, pero siempre acabo junto a ti a mil kilómetros de
mi.
Cada vez que me acerco más a ti me alejo más de mí. Pero te echaría
de menos si no estuvieras. Pero me echo de menos. Pero no lo entiendo. Perdí
las subordinadas esperando a que volvieras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario